Cómo Reescribir Tu Historia Personal y Transformar Tu Vida para Siempre | El Poder Secreto que Nadie Te Enseña

Por Fredy Serna Mejía – Coach, Mentor y Facilitador en Procesos de Transformación

El Momento que Me Abrió los Ojos

María llegó a mi consulta hace algunos años. Caminaba como si llevara piedras en los zapatos. Lo primero que me dijo fue: «Fredy, siempre he sido la oveja negra de mi familia. Supongo que así será toda la vida.»

Había algo en su voz. Esa forma de hablar de sí misma como si fuera una condena.

Charlamos hora y media. No hice nada del otro mundo. Solo tuve escucha profunda que se nos exige a los coaches, y mediante preguntas precisas le propicié que viera su historia desde otro lugar, lo que en coaching llamamos “cambiar del Balcón”, Cuando se iba, me dijo algo que todavía me resuena en la cabeza: «Dios mío… ¿cómo es que llevaba 45 años mintiéndome a mí misma?»

 

Tres años después, María tiene su propia empresa. Conversamos hace poco y me dijo: «Mi pasado sigue igual, pero yo cambié cómo lo veo. Y eso cambió todo, Fredy de verdad gracias fue algo maravilloso.

Ese día lo ratificó una vez más: no son los hechos los que nos marcan. Es la historia que nos contamos sobre esos hechos.

La Leyenda que Me Cambió Todo

Una de las tantas mentoras que se han cruzado en mi camino, me contó una historia en alguna ocasión: Me hablaba de un escritor que se quedó ciego de tanto escribir tragedias. Día tras día, solo escribía sobre dolor y desgracia.

Un día, cansado de la oscuridad, le rogó a Dios: «¿Cómo voy a ver la luz si solo sé escribir sobre lo malo?»

Y Dios le susurró algo que aún hoy me produce emoción: «Hijo, el problema no fue la tinta ni el papel. El problema fue que olvidaste que tú decidías qué escribir.»

Se dice que cuando escribió su primera historia de esperanza, recuperó la vista.

Mi mentora me miraba y me decía: «Fredy, tú también tienes una pluma. ¿Qué vas a escribir?»

No entendí hasta unos pocos años después. Pero cuando lo hice, todo cambió.

Las Mentiras que Nos Decimos

Después de tantos años acompañando gente, me di cuenta de algo. Casi todos vivimos con historias en la cabeza que nos están matando. Historias que repetimos sin darnos cuenta de que son veneno puro.

Te voy a contar las cinco mentiras más comunes:

«Soy un fraude» – Esta es brutal. La gente exitosa la tiene tatuada en el alma. «No merezco esto. Van a descubrir que no sé nada.»

«Siempre me pasa algo malo» – La historia de la mala suerte eterna. «¿Por qué a mí? ¿Por qué siempre yo?»

«Vengo de una familia jodida, nunca voy a cambiar» – El clásico. «Mis padres eran así, yo soy así. Es genético.»

«Solo valgo cuando ayudo a otros» – Se matan por todos, pero no se valoran.

«La vida es pura lucha» – Nunca pueden relajarse. Siempre viene la próxima batalla.

¿Te suena alguna? Tranquilo. Reconocerla es el primer paso.

El Método que Descubrí

Te voy a contar algo que es muy mío, muy personal. Este método nació cuando yo estaba pasando una época de muchos desafíos personales. Mi Coach me dijo algo que me hizo click: «Fredy, ¿y si no cambiaras tu historia, sino cómo la cuentas?»

Esa noche no pude dormir bien, me despertaba y se me venían imágenes a la cabeza, recuerdo que a cada despertaba escribía ideas desconectadas con la intención de desenmarañar tanto ruido en mi cabeza, y waooo a los pocos días pude hilvanar algo que me sirvió cantidades y que desde ese momento se ha convertido en una herramienta poderosa para mis coachees.

Ahí nacieron estos cinco pasos:

Paso 1: Reconocer sin juzgarse

«¿Qué me vengo diciendo que me está haciendo daño?»
No es para machacarse. Es para darse cuenta.

Paso 2: Buscar el origen

«¿Cuándo empecé a creerme esta historia? ¿De qué me estaba protegiendo?»

Toda historia tóxica nació para cuidarnos. Hay que agradecerle antes de soltarla.

Paso 3: Encontrar el tesoro

«¿Qué fortaleza desarrollé gracias a esta experiencia difícil?»

Aquí pasa la magia. El dolor se vuelve poder.

Paso 4: Escribir la nueva versión

«¿Cómo quiero contarme mi historia ahora?»

Aquí tomas la pluma y escribes consciente.

Paso 5: Vivirla

«¿Cómo voy a vivir desde esta nueva historia?»

De nada sirve escribirla si no la vives.

El Truco del Espejo (Que Funciona)

Esto suena raro, pero funciona. Lo he probado con cientos de personas.

21 días. Todas las mañanas. Frente al espejo. Pero no cualquier cosa:

Primera semana: Agradece tu historia vieja, no olvides lo que te he compartido en otros podcast tu historia es tu mejor escuela
«Gracias por cuidarme, pero ya no te necesito.»

Segunda semana: Declara tu nueva versión
«Soy el autor de mi historia. Elijo escribirme desde el amor.»

Tercera semana: Vive tu nueva identidad
«Hoy actúo como quien elegí ser.»

Te advierto: esto va a cambiar no solo cómo te ves tú. También cómo te ve el mundo.

Lo que Nadie Te Dice de la Autoestima

Las frases bonitas están bien. Pero son como curitas. Tapan, pero no curan.

La autoestima real no viene de repetir «soy genial» cien veces. Viene de cambiar la historia que tienes sobre ti.

Diferencia brutal:
– Frase bonita: «Soy valioso»
– Historia real: «Soy valioso porque todo lo que pasé me enseñó a ser quien soy»

¿Sientes la diferencia? Una es superficial. La otra viene del alma.

El Ritual de Esta Noche

Esta noche vas a hacer algo que puede cambiar tu vida. Necesitas:
– Una vela
– Un cuaderno
– Algo que te dé fuerza

Esto haces:

1. Prendes la vela y agradeces tu historia completa. Todo te trajo hasta aquí.

2. Haces dos columnas:
– «Lo que suelto»
– «Lo que abrazo»

3. Escribes sin filtros 10 minutos en cada una.

4. Lees solo la derecha en voz alta, con todo tu corazón.

5. Guardas el papel como un contrato sagrado contigo.

La Pregunta que Todo lo Cambia

Antes de irme, quiero dejarte con esto:

¿Qué historia escribirías sobre ti si supieras que no puedes fallar?

La respuesta no está en tu cabeza. Está en tu corazón. Solo debes tener valentía para escucharla.

Tu historia no es lo que te pasó. Es lo que haces con lo que te pasó.

El cuaderno está abierto. El lápiz en tu mano.

¿Qué vas a escribir?

Tu nueva historia empieza ahora. La persona que viniste a ser te está esperando.